REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

PODER JUDICIAL
Tribunal Segundo de Primera Instancia en funciones de Juicio
Circuito Judicial Penal del estado Vargas
Macuto, 30 de junio de 2011
201º y 152º
ASUNTO PRINCIPAL : WP01-P-2010-004008
ASUNTO : WP01-P-2010-004008
Corresponde a este Juzgado emitir pronunciamiento con ocasión a la solicitud interpuesta por el profesional del Derecho RICARDO MESINA, Defensor Público Penal Décimo de esta Circunscripción Judicial en su carácter de defensor de los ciudadanos KEVIN JOEL GUEVARA FERNÁNDEZ y EDWAR ANTONIO ALDANA, acusados en la presente causa en el sentido de que les sea sustituida la medida de privación judicial preventiva de libertad por una menos gravosa, de conformidad con lo establecido en el artículo 256 del Código Orgánico Procesal Penal. Del contenido del escrito consignado con fundamento en los artículos 264 del Código Orgánico Procesal Penal; 9 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y 49.2 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela se desprende:
“…(omissis)…el artículo 264 del Código Orgánico Procesal Penal, establece el examen y revisión de la medida cautelar por una menos gravosa; el legislador al establecer las medidas cautelares sustitutivas, le garantiza al imputado gozar de estado de libertad durante la fase investigación, el desarrollo de la fase intermedia o juicio, con estricta garantía de buena fe de que éste cumpla con hacer frente a la justicia, mediante el movimiento del aparato jurisdiccional (…) Las persona que están en espera de juicio acusadas de una infracción penal, por regla general deben respetársele el derecho a la libertad y la presunción de inocencia…”
Ahora bien, en fecha 06 de julio de 2010, el Ministerio Público presentó por ante el Juzgado Primero de Primera Instancia en funciones de Control de este Circuito Judicial Penal a los ciudadanos KEVIN JOEL GUEVARA FERNÁNDEZ y EDWAR ANTONIO ALDANA, por ser aprehendidos en flagrancia, siendo oídos estando debidamente asistidos de defensa técnica, acordando ese Juzgado en audiencia medida de privación judicial preventiva de libertad, de conformidad con lo establecido en el artículo 250 en relación con los numerales segundo, tercero y parágrafo primero del artículo 251, ambos del Código Orgánico Procesal Penal, la cual fue posteriormente fundada al existir elementos de convicción que comprometían su participación en la presunta comisión de los delitos de HOMICIDIO CALIFICADO CON PREMEDITACIÓN Y ALEVOSÍA, EN GRADO DE COMPLICIDAD CORRESPECTIVA, AGAVILLAMIENTO, previstos y sancionados en los artículos 406.1 en estricta relación con el artículo 424 y 286 todos del Código Penal, realizándose el día 15/12/2010 la audiencia a que se contrae el artículo 327 del Código Orgánico Procesal Penal en la cual se dictó el auto de apertura a juicio, encontrándose la causa actualmente al estado de celebrarse el juicio oral y público.
La defensa fundamenta su solicitud de examen y revisión de la medida invocando los principios de presunción de inocencia, afirmación de libertad y estado de libertad, manifestando que aquella constituye una condena anticipada pues no se le ha dado la oportunidad a los imputados de demostrar su disposición de someterse a la persecución penal.
Conforme al contenido del artículo 264 del Código Orgánico Procesal Penal, el cual establece que: “...El imputado podrá solicitar la revocación o sustitución de la medida judicial de privación preventiva de libertad las veces que lo considere pertinente…”. En este sentido, debe destacarse que la revisión de la medida es procedente, cuando en el decurso de su vigencia se modifiquen los elementos fácticos que la motivaron, caso en el cual, en observancia de principios rectores del proceso como lo son la afirmación de libertad y la presunción de inocencia, debe atenuarse el rigor de la medida de coerción personal ante la aparición de las mismas.
Delimitado como ha sido el alcance y motivo de la petición, quien aquí decide observa que efectivamente, la medida que actualmente sufren los procesados es aquella que excepcionalmente se puede decretar para asegurar las resultas del proceso, esto es, el dictado de una sentencia donde cumplidas todas las formalidades y garantías constitucionales y legales, se establezca la responsabilidad o absolución de los hechos que imputa el Ministerio Público.
En este orden de ideas, si bien el pronunciamiento de la medida de privación judicial preventiva de libertad ciertamente restringe el derecho a la libertad personal del individuo, tanto el legislador como el constituyente permiten esta inherencia en los derechos del justiciable frente a la necesidad de que se desarrolle el ius puniendi del Estado; entonces, resulta evidente que el decreto de la restricción de la libertad personal de los ciudadanos KEVIN JOEL GUEVARA FERNÁNDEZ y EDWAR ANTONIO ALDANA per se limita sus derechos fundamentales, pero ello se ha hecho, de manera excepcional y con observancia de las formalidades de Ley.
En otra línea argumental, la defensa no aporta ningún alegato o probanza que desvirtúe la presunción del peligro de fuga en vista de la pena que eventualmente se puede imponer o la magnitud del daño causado, que sirvieron de fundamento para restringir la libertad de los encartados en este proceso y aparecen al día de hoy evidentes, toda vez que, a la fecha ya fue presentado el escrito acusatorio por la representación fiscal y admitido por el Juzgado de Control en su totalidad en la audiencia preliminar como se refirió supra.
En virtud de lo retro apostillado, al apreciar en concreto la magnitud del daño causado, por tratarse el hecho atribuido de una conducta ofensiva a la vida, como máximo objeto de tutela penal, y la eventual pena que podría imponerse con un límite máximo superior a los diez años, operando en consecuencia la presunción iuris et de iure sobre la prognosis de evasión, circunstancias previstas en el artículo 251 del Código Orgánico Procesal Penal en sus numerales segundo, tercero y parágrafo primero para presumir fundadamente el peligro de fuga del imputado, se declara SIN LUGAR la solicitud interpuesta por la defensa técnica y en consecuencia se MANTIENE la medida de privación judicial preventiva de libertad decretada en contra de los ciudadanos KEVIN JOEL GUEVARA FERNÁNDEZ y EDWAR ANTONIO ALDANA, acordada el 06 de julio de 2010, toda vez que el procedimiento se encuentra asegurado con la imposición y mantenimiento de la medida impuesta, siendo éste el fin que se persigue con la privación judicial preventiva de libertad de las personas que son presuntamente responsable de la comisión de este tipo de delito y verificados como han sido los supuestos establecidos por el legislador procesal penal en el artículo 250 para su decreto, amén de existir para la fecha actual acusación en contra de los justiciables, que fuera debidamente admitida por el Tribunal de Control en la fecha supra mencionada. Y ASÍ SE DECIDE.
DISPOSITIVA
En fuerza a las razones de hecho y de derecho anteriormente expuestas, este Juzgado Segundo en Funciones de Juicio del Circuito Judicial Penal del estado Vargas, administrando justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley, emite los siguientes pronunciamientos: Declara SIN LUGAR la solicitud interpuesta por la Defensa de los ciudadanos KEVIN JOEL GUEVARA FERNÁNDEZ y EDWAR ANTONIO ALDANA, y en consecuencia se MANTIENE la medida de privación judicial preventiva de libertad decretada en su contra, al apreciar en concreto la magnitud del daño y la eventual pena que podría imponerse, manteniéndose la presunción del peligro de fuga conforme a lo establecido en los numerales segundo, tercero y parágrafo primero del artículo 251 del Código Orgánico Procesal Penal, toda vez que el procedimiento se encuentra asegurado exclusivamente con la imposición y mantenimiento de la medida impuesta.
Publíquese, regístrese, déjese copia de la presente decisión, notifíquese a la defensa y ofíciese al Ministerio Público.
LA JUEZ,

ANA MARÍA SÁNCHEZ.
LA SECRETARIA,

ROSA LILIANA CARRERA.